

Prevención y consejos
Inestabilidad de Hombro: Cuándo se Recomienda la Reparación Artroscópica
La cirugía ortopédica ha permitido grandes avances en el tratamiento de las lesiones de hombro, especialmente en casos de inestabilidad glenohumeral. Esta patología, que afecta a personas jóvenes y deportistas, puede parecer inicialmente un episodio aislado, pero es fundamental reconocer cuándo se convierte en un problema crónico que requiere intervención.
Pongamos como ejemplo las luxaciones de hombro. Aunque el primer episodio suele tratarse de forma urgente y aislada, a partir del segundo episodio el riesgo de recaída se dispara, y es aquí donde la cirugía artroscópica se convierte en una herramienta clave para evitar más daño.
El Dr. Marcos de la Torre, especialista en la Unidad de Hombro de CEMTRO Premium, nos explica cómo identificar esta inestabilidad y cuándo es el momento adecuado para plantear una reparación quirúrgica.
¿Cómo saber si tienes inestabilidad de hombro?
El hombro que se “sale” más de una vez no es normal
La inestabilidad de hombro suele manifestarse tras una luxación traumática. El paciente, en un primer episodio, acude a urgencias para que le “recoloquen el hombro”. Pero el verdadero problema aparece cuando esa luxación se repite.

“Un paciente que ya ha tenido una primera luxación de hombro y sufre un segundo o tercer episodio, prácticamente siempre sabe que se le ha vuelto a salir. Ya no necesita confirmación médica: reconoce la sensación, el dolor y la limitación al instante”, explica el Dr. Marcos de la Torre.
¿Qué hacer después de la segunda luxación?
A partir del segundo episodio, el riesgo de recaída se dispara
Está demostrado que tras una segunda luxación de hombro, el riesgo de una tercera supera el 90-95%. Es decir, una vez que la articulación ha perdido su estabilidad estructural, es muy probable que vuelva a luxarse sin intervención.

“Por eso, a partir del segundo episodio de luxación, recomendamos valorar una reparación artroscópica de los ligamentos dañados”, añade el especialista.
Este procedimiento mínimamente invasivo permite reparar las estructuras estabilizadoras, como el labrum glenoideo y la cápsula articular, devolviendo al hombro su funcionalidad y reduciendo significativamente el riesgo de futuras luxaciones.
Beneficios de la cirugía artroscópica del hombro inestable
- Técnica mínimamente invasiva
- Rápida recuperación postoperatoria
- Altos índices de éxito en deportistas y pacientes activos
- Prevención de daño progresivo (cartílago, hueso, tendones)